ANITSAIO – KILINDRAS – PORTES – ANITSAIO
5,8 km / 3 horas 15 minutos (ruta circular)
Grado de dificultad: fácil / moderado
Comienzo del camino: Anitsaio (frente a la iglesia del pueblo)
Desde el pueblo de Anitsaio con su característico molino de viento, desciende hacia el norte hasta el bosque de pinos junto al pequeño desfiladero que tiene una rica vegetación y una gran biodiversidad. En todos los bosques de pinos de la isla, en el pasado hubo una importante actividad económica basada en la recolección de resina. El camino continúa pasando los tanques de recolección de agua de lluvia, tallados en la roca, llamados ‘suvales’, que indican el asentamiento tradicional Kylindra, al que se puede llegar después de una hora de caminata.
El pueblo ofrece maravillosas muestras de arquitectura y decoraciones populares. En la plaza del pueblo giramos a la derecha; después de unos 100 m, tomamos el camino de tierra a la derecha que nos lleva a un camino que lleva al borde de la aldea costera, Portes. Pasando el pueblo, comenzamos el ascenso a Anitsaio, continuando por un bello camino empedrado, bordeado por muros de piedra y exuberante vegetación. Atención: después del cementerio, entramos en la carretera de asfalto, que salimos después de 100 m, girando a la derecha para encontrar nuevamente el camino que cruza el hermoso paisaje rural con las antiguas terrazas.
La ruta ofrece asombrosas vistas de las laderas con rocas talladas de la natura y el mar, así como una variedad de hábitats que aún albergan aves rapaces. Podemos disfrutar de algunas de las más de 1000 especies de flora que se han registrado en Aegina: árboles, arbustos, arboledas y pastos. Encontramos pinos (pinus halepensis), arbustos de ciprés (Juniperus), masilla (Pistachia lentiscus) y robles perennes (Quercus coccifera). También observamos, admiramos y olemos plantas aromáticas y medicinales que transportan néctar, como lavanda silvestre, azafrán y tomillo. Con un poco de suerte y dependiendo de la temporada, podemos ver plantas raras y nativas como sapos otoñales, lirios y orquídeas silvestres.